Seguro que has oído o probado incluso el viejo truco de las madres y abuelas para comprobar si un huevo fresco se hunde o flota con un vaso de agua. Si te preguntas por qué un huevo fresco se hunde mientras que los huevos en mal estado o podridos flotan, te lo explicamos. O más bien lo explica la ciencia.
Antes de nada, debemos aclarar que en los huevos se imprime casi siempre la fecha recomendada para su consumo, pero no la de caducidad del huevo. Esta confusión hace que los españoles tiremos más de 188 millones de huevos al año según un estudio de Too Good to Go, la start up que lucha contra el desperdicio de alimentos en España y en toda Europa.
Y todo porque existe la falsa creencia de que si un huevo flota está contaminado y no es apto para el consumo. Lo cierto es que el hecho de que si un huevo fresco se hunde o flota en la prueba del agua indica realmente que no está fresco, pero no que haya trazas de contaminación. Para esto habría que abrirlo y comprobar la coloración y sobre todo el olor.
La prueba para saber si un huevo fresco se hunde o flota y por qué
Aunque existen otras formas para comprobar si un huevo está podrido o es apto para el consumo, la más popular es la del bol con agua o prueba de flotación. Con esta se presume de saber si un huevo fresco se hunde o flota y por lo tanto si hay garantías para su consumo o mejor tirarlo porque se ha pasado.
Con un vaso llenado 3/4 de su capacidad, se introduce el huevo a comprobar si flota o se hunde. Podemos obtener tres situaciones diferentes, con sus respectivas implicaciones. A saber:
- Escenario 1: el huevo se hunde completamente y sin lugar a dudas. Aquí tenemos la certeza de que el huevo se mantiene completamente fresco y por lo tanto no tendría por qué presentar ningún olor extraño o coloración diferente en la yema o en la clara.
- Escenario 2: el huevo se hunde pero tiende a flotar, levantando la parte superior y quedando como si se tratara del "menhir de Obélix". Esta situación indica que si bien el huevo aún se mantiene fresco, aunque comienza a 'envejecer', por lo que se puede y debe comer cuanto antes.
- Escenario 3: el huevo flota completamente. Indica que está pasado, pero no tiene por qué suponer que esté podrido. Para comprobarlo hay que abrirlo y observar su aspecto, además de olerlo. Y sí, en el caso de que se haya podrido, el olor lo delatará nada más abrirlo.
¿Por qué los huevos flotan cuando están pasados?
¿A qué se debe estas resoluciones? ¿Por qué cuento está pasado un huevo fresco se hunde o flota en el agua? La explicación está en su propia naturaleza.
La yema, la clara del huevo y los gases internos hacen que el huevo presente mayor densidad que el líquido que lo contiene, de modo que es más pesado que el agua 'que lo soporta'. En consecuencia, el huevo se hunde hasta el fondo.
Cuando el huevo comienza el proceso de descomposición, libera los gases contenidos sobre la clara y la yema, y los descompone. Esto les conduce a ser gases y por lo tanto, con menor densidad que el agua. Esto supone que el huevo flota cuando no está fresco.
Ojo, que no significa que el huevo se hunda o flote porque tiene menos o más gases. La masa permanece siempre invariable.
Si abres un huevo podrido comprobarás que la yema muestra cierta decoloración, y la clara está turbia, además que lo habitual es no necesitar tan siquiera a ver cómo está con el fuerte olor que desprende cuando un huevo está podrido. Pero, insistimos, que un huevo flote no significa que esté podrido.
El olor que se desprende corresponde a sulfuro de hidrógeno, uno de los más pesados en el aire que inflamable y tóxico. Esperamos que con esta explicación hayas comprendido por qué un huevo fresco se hunde o flota en el agua.